fbpx

Cómo atraer a los candidatos correctos para tu organización

TALENTO, esto es lo que buscan las empresas cuando inician un proceso de selección de personal. Su objetivo es encontrar lo antes posible a esa persona que encaje a la perfección en los parámetros del puesto a cubrir. Que posea unas habilidades duras y blandas que le permitan desarrollar las tareas propias del trabajo y, además, que tenga una personalidad que se ajuste bien a la cultura de la empresa.

Esto, que podría parecer sencillo, no tiene nada de fácil en el momento actual. Porque no siempre los candidatos que se presentan son los más adecuados para cubrir el puesto, y esto puede dar lugar a tres circunstancias diferentes:

  • Que el puesto se quede sin cubrir.
  • Que se tarde mucho en encontrar al aspirante adecuado.
  • Que se acabe por contratar a alguien que no termina de encajar del todo y que tarde o temprano saldrá de la organización por voluntad propia o por decisión de la empresa.

Cada día que un puesto está sin cubrir, la empresa está perdiendo dinero. Porque tiene que dedicar recursos económicos a la selección y, a la vez, su productividad está por debajo de lo habitual porque su plantilla no está completa.

Por tanto, es absolutamente necesario poder cubrir de forma eficiente las vacantes lo antes posible. Y esto solo se puede hacer realidad si las personas que se presentan al proceso de selección son candidatos que encajan más o menos con lo solicitado.

Los responsables de Recursos Humanos tienen ante ellos un gran reto: conseguir que los procesos de selección sean lo suficientemente atractivos y eficaces como para que las personas con un talento destacado decidan participar en ellos. Vamos a ver cómo se puede lograr este objetivo.

Tabla de contenidos

Definir una marca empleadora

La reputación se ha convertido en algo esencial para las empresas a la hora de vender sus productos o servicios. Porque, con frecuencia, los consumidores hacen una búsqueda de información antes de tomar su decisión de compra.

Si ven que una marca recibe muchos comentarios negativos, lo más probable es que no se arriesguen y no formalicen su compra o la contratación del servicio. Por el contrario, si la reputación de la empresa es buena, existen muchas más posibilidades de que el potencial cliente acabe convirtiéndose en un cliente real.

Con la marca empleadora ocurre algo similar, porque se trata de la reputación que se ha labrado una empresa como lugar para trabajar. Si esa reputación es buena, sus ofertas de empleo serán bien acogidas por aquellas personas con talento que desean seguir avanzando en su carrera laboral. Estas querrán participar en el proceso de selección porque son conscientes de que puede ser su puerta de entrada a una organización que tiene muchas cosas buenas que ofrecerles.

Sensu contrario, si la reputación como marca empleadora es negativa, el talento no va a querer participar en sus procesos de selección.

Tener una buena marca empleadora es cuestión de tiempo y esfuerzo. Al final, lo importante es que exista una total coherencia entre la cultura y los valores que propugna la empresa y las acciones que lleva a cabo. Si existe dicho equilibrio, esto acaba trascendiendo los límites de la empresa y empieza a ser de dominio público, porque el boca a boca de los empleados puede funcionar mejor que cualquier campaña publicitaria.

Mejorar la experiencia de los candidatos

No basta con tratar bien a los empleados, también hay que hacerlo con los candidatos. Para ellos, el proceso de selección puede llegar a ser duro, y hay que intentar hacerles las cosas un poco más fáciles.

Una buena comunicación es un estupendo punto de partida para una experiencia de los candidatos que resulte satisfactoria. La empresa debe comunicar los pasos en los que se va a dividir el proceso y los plazos que tiene para los mismos.

Un enfoque amigable y respetuoso hacia los candidatos causa una buena impresión en los mismos y mejora la marca empleadora.

Además, que un candidato no sea idóneo ahora no quiere decir que no lo sea en el futuro para otro puesto. Si su experiencia ha sido positiva, no dudará en participar en otros procesos de selección, por lo que su talento podría formar parte de la empresa tarde o temprano.

Utilizar los canales de reclutamiento adecuados

Con frecuencia, las empresas no encuentran entre sus candidatos a las personas adecuadas porque no están buscando donde deberían. Si siempre pescas en el mismo río, siempre vas a capturar los mismos peces.

Es cierto que las plataformas en línea para publicar ofertas de empleo funcionan muy bien. En tan solo unos minutos la empresa puede recibir decenas de currículums, pero esto no es sinónimo de efectividad. Porque pasa con frecuencia que de 100 currículums apenas uno o dos se ajustan mínimamente a la vacante.

Para que esto no ocurra, la clave está en buscar candidatos con talento allí donde se sabe que pueden estar.

En algunos casos puede ser útil utilizar plataformas especializadas en búsqueda de empleo, pero en otros sería interesante acudir a universidades o centros de Formación Profesional, a asociaciones de desempleados, e incluso recurrir a un cazatalentos.

Para saber dónde buscar, primero hay que tener claro qué se está buscando. Una vez definidos el puesto y el perfil a cubrir, no será complicado determinar en qué lugares se puede encontrar más fácilmente ese talento.

Cultivar una red de talentos

Parece que el networking es algo propio de los profesionales que trabajan por cuenta propia, pero también a las empresas les viene bien tener su propia red de contactos profesionales. De hecho, estos contactos pueden ser un buen lugar para empezar a buscar candidatos, incluso cuando la vacante todavía no se ha anunciado de manera oficial.

La empresa se relaciona a diario con otras empresas y profesionales de su sector. Si cultiva esa relación, puede descubrir que los candidatos más talentosos están relacionados de una u otra forma con los miembros de su red de contactos.

Por ejemplo, ese abogado laboralista con el que la empresa colabora de vez en cuando puede ser el candidato idóneo para cubrir el puesto de jefe del departamento de personal. O podría ser él quien recomiende a un buen aspirante para esa vacante.

Ofrecer oportunidades de crecimiento y desarrollo

Muchas ofertas de empleo se centran en cuestiones básicas como las tareas a realizar en el puesto ofertado y la banda salarial. Aunque estos datos son esenciales, ahí fuera hay personas talentosas para las que esto no es suficiente para postularse a un puesto.

Porque están en un momento de su vida en el que buscan algo más que la seguridad de saber que van a cobrar una determinada cantidad de dinero. Quieren progresar, desarrollarse a nivel profesional. Saber que un nuevo empleo puede suponer un nuevo reto, y no simplemente cambiar el lugar en el que se llevan a cabo las labores habituales de la profesión ejercida.

En este sentido, las empresas que ofrecen oportunidades de crecimiento y desarrollo lo tienen un poco más fácil para que en sus procesos de selección participen personas con talento y dispuestas a comprometerse con la organización.

Pero, como decíamos antes, es necesario que haya una coherencia entre lo que la empresa propugna y lo que realmente hace. De nada sirve ofrecer oportunidades de desarrollo en el anuncio de trabajo si a la hora de la verdad no va a ser así. Porque esto puede dar lugar a que se encuentre al candidato idóneo, pero que este se sienta desencantado cuando se dé cuenta de la verdad y decida abandonar el proceso de selección, o incluso la empresa si ya hubiera sido contratado.

Ofrecer beneficios competitivos

Una oferta de trabajo es también un anuncio en el que la empresa debe “venderse” un poco a sí misma. Si el objetivo es captar candidatos con talento que se ajusten bien a lo que se está buscando, hay que ofrecerles algo que resulte un incentivo para ellos. Beneficios que les hagan darse cuenta de que puede merecer la pena pasar por un proceso de selección.

Aquí es importante tener en cuenta qué es lo que más demanda la sociedad en este momento. Ahora, además de un sueldo competitivo, se valora mucho que la organización ofrezca programas de conciliación, teletrabajo, seguro médico, becas de formación, posibilidades de ascenso, etc.

Haciendo un esfuerzo en las diferentes áreas que hemos visto, las empresas se convierten en un lugar más atractivo para trabajar. Consiguiendo que quienes están buscando empleo vean en los puestos que estas ofertan una buena oportunidad para mejorar tanto a nivel profesional como personal.

Con pequeños ajustes en la forma de entender y llevar a cabo el proceso de selección, y el trato a los empleados, se pueden conseguir grandes cambios. Porque implementando estrategias como las que hemos visto se consigue una posición favorable a la hora de atraer candidatos que tengan talento y cuyos valores y objetivos se alineen con los de la organización. 

Una buena selección de personal es la base para construir equipos de trabajo de alto rendimiento, así que merece la pena hacer esfuerzos para que esa selección sea cada vez más eficiente y efectiva.

Deja un comentario



Etiquetas populares


Publicaciones recientes


RESERVA TU DEMO

Ahora puedes probar nuestra demo antes de contratar el servicio. Así podrás descubrir todo el potencial de nuestro software.